Informes y FAQ
Muchas veces las personas con quienes nos encontramos nos hacen preguntas acerca de nuestro futuro vocacional. En esta sección hemos recogido algunas preguntas significativas y hemos tratado de darles respuesta.
¿CUÁNTO DURA EL CAMINO DE SEMINARIO Y CÓMO SE DIVIDE?
Dependiendo la etapa en que se ingrese al Seminario son los años a cursar en él. Si se ingresa a la Secundaria, serán 15 años; si se ingresa a la Preparatoria, serán 12 años; si se ingresa al curso de Nivelación serán 10 años de formación. El Seminario de Guadalajara se divide en dos grandes etapas de formación: Seminario Mayor (Curso Introductorio, Facultad de Filosofía y Facultad de Teología) y Seminario Menor (Secundaria y Preparatoria).
EN ESTOS MOMENTOS ESTOY TRABAJANDO, ¿DEBO DEJARLO INMEDITAMENTE?
No necesariamente. Cada situación personal va verificada con las exigencias de la vida comunitaria y con los cursos formativos del Seminario según los ritmos y las dinámicas de crecimiento del individuo. Normalmente después de un tiempo, si se tienen las ganas de tomar en serio las exigencias de la vida de Seminario, no será posible continuar con un trabajo fuera del Seminario.
EN ESTOS MOMENTOS ESTOY TRABAJANDO, ¿DEBO DEJARLO INMEDITAMENTE?
No necesariamente. Cada situación personal va verificada con las exigencias de la vida comunitaria y con los cursos formativos del Seminario según los ritmos y las dinámicas de crecimiento del individuo. Normalmente después de un tiempo, si se tienen las ganas de tomar en serio las exigencias de la vida de Seminario, no será posible continuar con un trabajo fuera del Seminario.
¿QUÉ RELACIÓN SE LLEVA CON LOS SACERDOTES FORMADORES?
La presencia de los sacerdotes formadores garantiza al seminarista que el Señor no lo deja solo en la decisión respecto a su futuro. Los formadores tienen la tarea de ayudar al seminarista a comprender el plan de Dios sobre él y a que responda positivamente. No son controladores, son guías en el camino hacia el descubrimiento y realización del proyecto de Dios en cada seminarista.
¿PUEDO DECIDIR INTERRUMPIR MI CURSO DE SEMINARIO EN CUALQUIER MOMENTO?
Entrar en el Seminario no significa tomar un camino cuya única salida es el ministerio sacerdotal. Significa, sobre todo, iniciar un camino para comprender el proyecto de Dios y la capacidad personal de responder a ese proyecto. En cualquier momento el individuo es libre de abandonar el Seminario, si se ha descubierto que el Señor lo llama en otra dirección.
¿SOBRE CUÁLES PARÁMETROS VENDRÁ JUZGADA MI IDONEIDAD?
Los criterios que se evalúan se basan sobre la vida espiritual, la madurez humana, psicológica y afectiva y sobre la preparación teológica y pastoral de cada seminarista.
¿CÓMO PUEDO DARME CUENTA DE QUE SOY LLAMADO A SER SACERDOTE?
¿Se escucha una voz? ¿Se siente una experiencia particular? ¿Se siente algo en el interior de cada uno?
Los casos en los cuales la vocación se advierte a través de manifestaciones extraordinarias son en realidad muy pocos. Normalmente no se siente nada, sólo se tiene la conciencia de que la vocación sacerdotal es insinuada en el fondo del corazón y pide ser tomada en consideración. La llamada viene de un Dios que es respetuoso del hombre, de un Dios que no fuerza las puertas, sino que habla al corazón a través de su Hijo Jesucristo. Si Jesús te llama a seguirlo por el camino del sacerdocio, tú te das cuenta, entonces, de que tu corazón tiene necesidad de algo más y no basta el amor de una mujer, de una familia. Poco a poco nace en ti el deseo de consagrar a Él toda la vida para ser de todo el mundo tu familia. Después este deseo se transformará en búsqueda, se transformará en una aventura estupenda que durará toda la vida.
¿QUIÉN ME PUEDE AYUDAR? ¿QUÉ NECESITO HACER?
No se descubre a solas la voluntad de Dios; es necesario ser guiador por una persona experta en las cosas del Espíritu. Reza, haz oración y también hazte ayudar de alguno que viva en intimidad con Dios para que te escruten con ojos del Señor y te aconsejen sobre lo que debas hacer. Lo más recomendable es que te ayude un sacerdote.
QUISIERA SER SACERDOTE, PERO ALGUNOS ASPECTOS DE SU VIDA (POR EJEMPLO, NO TENER UNA FAMILIA PROPIA) ME ESPANTAN ¿ESTO ES SIGNO DE QUE NO SOY LLAMADO?
No. Cada elección que abarca toda la vida tiene siempre ese aspecto de temor y de duda; sin embargo, ni la duda ni el temor deben frenar una respuesta positiva al Señor. El único verdadero miedo debe ser aquél de no responder a quien nos ama y nos pide amarlo con corazón indiviso. Además la vida de pobreza, de castidad y de obediencia que se pide al sacerdote no debe ser considerada como un precio a pagar para realizar un ideal, sino como la respuesta generosa a la llamada que Jesús hace también a nosotros como a Pedro: “¿Me amas más que estos?” (Jn. 21, 15)
¿QUÉ SE NECESITA PARA INGRESAR AL SEMINARIO?
Realizar un curso que se llama Preseminarios: se realizan en la semana de Pascua y en el mes de Julio cada año. Solicitar informes al Centro de Promoción Vocacional del Seminario:
Jarauta 510, Col. La Perla, Guadalajara, Jal. C.P. 44360.
33 3617 2650
+52 1 33 1972 4003
Centro de promoción vocacional
OTRAS PREGUNTAS…
Si tienes otras preguntas no dudes en escribirnos un correo electrónico o llamar por teléfono o incluso venir al Seminario para platicar con alguno de los sacerdotes formadores.
Existe en el Seminario de Guadalajara el Centro de Promoción vocacional. Todas las referencias se encuentran en la sección contacto.
